La alta complejidad presente en cada tratamiento oncológico

Desde su puesta en marcha, el Instituto Misionero del Cáncer (IMC) consolidó un recorrido de casi siete años con múltiples logros que transformaron la atención oncológica en Misiones. “Los logros principales serían la implementación y el funcionamiento del equipo de radioterapia externa, que es un tratamiento de alta complejidad, y el inicio de la braquiterapia para cáncer de cuello uterino. Antes derivábamos a las pacientes a otras provincias y hoy pueden completar el tratamiento en el tiempo óptimo”, destacó Marcela Morínigo Kober, directora del IMC.

Por otra parte, explicó que la radioterapia de intensidad modulada (IMRT) también se encuentra disponible en el instituto. Esta técnica se emplea sobre todo en cánceres de cabeza y cuello porque permite reducir la irradiación de tejidos sanos, disminuyendo así los efectos adversos. La especialista aclaró que su aplicación se expande cada vez más hacia otros tumores.

“Desde el 2021 comenzamos a ocuparnos de los programas de prevención de cáncer, y además contamos con unidades funcionales que organizan la atención a través de comités de tumores. Los lunes vemos casos ginecológicos, los martes de mama, los miércoles neurológicos, los jueves colorrectales y los viernes cabeza y cuello, esófago gástrico y tórax”, relató la funcionaria.

Del mismo modo, señaló que la implementación de unidades funcionales abrió paso a jornadas científicas específicas. En ese marco, se llevó adelante la tercera jornada de enfermería oncológica, con la participación de profesionales locales y la consolidación de una formación sistemática en cuidados especializados.

En cuanto a la atención integral, el IMC dispone de consultorios de oncología, ginecología, mastología, urología, dermatología, distintas cirugías, además de áreas de psicología, nutrición y trabajo social. La farmacia oncológica y el hospital de día complementan esta red de servicios, con equipos en permanente capacitación.

“Pudimos sostener la residencia de oncología, que se originó en 2015 y que nos convierte en formadores de especialistas. Este año volvió a ingresar una residente, lo que asegura la continuidad de la capacitación”, recordó la directora.

“Los equipos multidisciplinarios del IMC reúnen oncólogos subespecialistas, urólogos, radiólogos, patólogos, traumatólogos, dermatólogos, genetistas y kinesiólogos, según el tipo de tumor. Esa diversidad garantiza que cada paciente reciba un abordaje integral y específico”, explicó Morínigo Kober.

Finalmente, subrayó que la institución consolidó canales de contacto directo para los pacientes, que pueden comunicarse vía Whatsapp con todas las áreas y programas de prevención. 

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